Este artículo es una colaboración con la autora Marta Puchol. Licenciada en Farmacia y Coach Nutricional.
La menopausia y la perimenopausia son etapas de transición en la vida de una mujer que pueden conllevar cambios significativos en su salud y bienestar. Durante este período se producen fluctuaciones hormonales que afectan a diversas funciones del cuerpo, incluyendo la composición de la microbiota intestinal, también conocida como flora intestinal.
En este artículo exploraremos la importancia de mantener una microbiota saludable durante esta etapa de la vida y cómo esto puede contribuir a mejorar la calidad de vida de las mujeres en un momento de transición hormonal.
Síntomas de la menopausia.
La menopausia es el periodo de finalización de la edad fértil de la mujer y se diagnostica tras 12 meses de la desaparición de la menstruación. Sin embargo, la transición a la menopausia puede comenzar hasta 4 años antes y podemos encontrar mujeres con signos de premenopausia a partir de los 40. En este periodo los niveles hormonales de estrógenos oscilan de manera irregular, alargando o acortando los ciclos menstruales y asociados a una sintomatología similar a la menopausia cuya gravedad varía de una mujer a otra, como son: síntomas vasomotores, con la aparición de sofocos, síntomas genitourinarios como atrofia, infecciones urinarias y sequedad vaginal, cambios emocionales afectando al estado de ánimo y al sueño, pero también síntomas no visibles como la pérdida de masa ósea, que si no se diagnostica y se trata puede desembocar en una osteoporosis en la menopausia. A este periodo donde aparecen los primeros síntomas se le denomina perimenopausia.
Desde hace unos años, con el objetivo de conocer el origen de la variabilidad de estos síntomas entre las mujeres, se han comenzado a estudiar los factores que pueden influir en el vaivén hormonal y cómo poder minimizar los signos asociados a ellos, que sin duda están relacionados con la disminución de la producción de estrógenos de los folículos ováricos.
Relación entre la microbiota y las hormonas sexuales.
Se sabe que tenemos millones de microorganismos poblando nuestro cuerpo, pero nos centraremos en el intestino, ya que es el órgano donde se encuentran más variedad de familias de estos millones de especies. Todas ellas conforman la microbiota intestinal y para que haya una buena funcionalidad deben tener un equilibrio unas con otras, porque si no lo hubiera, estaríamos ante una disbiosis intestinal, cuyas consecuencias no solo se centran a nivel digestivo sino que afectan al funcionamiento de diferentes sistemas del organismo.
Desde hace algunos años se estudia a fondo la microbiota. Hasta ahora se sabe que es clave en la salud de la persona por estar involucrada en los procesos inmunológicos y hormonales, entre estas últimos, los estrógenos y la progesterona no son una excepción.
Teniendo en cuenta esto, todo parece indicar que una microbiota sana contribuye a la disminución de los temidos síntomas que se dan en la mujer en el periodo previo a la menopausia.
¿Cómo actúa el estroboloma frente a los estrógenos?
La respuesta la tienen estudios realizados en mujeres en perimenopausia y postmenopausia, donde se explica la relación bidireccional entre ambas hormonas sexuales, los estrógenos y progesterona, con el microbioma intestinal. Por un lado, parte del microbioma intestinal sintetiza la beta-glucuronidasa, una enzima que actúa a nivel hepático sobre los estrógenos libres circulantes, impidiendo su metabolización, facilitando su reabsorción y en consecuencia evitando ser eliminados, de esta forma los estrógenos son transformados de nuevo en activos para que puedan actuar de nuevamente en órganos diana.
Estas familias de microorganismos de la microbiota responsables de la recaptación de estrógenos se denominan estroboloma.
A su vez en los estudios se observó que los estrógenos sirven de sustrato a la microbiota, contribuyendo a mantener el equilibrio bacteriano intestinal.
Por esto, las conclusiones de los estudios determinaron que una microbiota equilibrada, produce menos caída del nivel de estrógenos circulantes y esto disminuye, en las mujeres en perimenopausia, los síntomas asociados a la pérdida de producción de hormonas sexuales características de este periodo de la vida de la mujer.
Con ello se ha abierto una línea de investigación con un futuro prometedor para las mujeres pudiendo tanto prevenir los síntomas desagradables de la menopausia, como mantener la salud ósea en su edad madura.
El impacto silencioso de la microbiota.
En un enfoque de salud más integral es esencial tener en cuenta la interconexión entre nuestro cuerpo y los microorganismos que residen en nuestro intestino. La microbiota se está convirtiendo en un área de investigación fascinante y su influencia en la salud de las mujeres durante la menopausia y perimenopausia es una muestra de su impacto global.
Al mantener una microbiota equilibrada contribuimos a un estroboloma eficiente, lo que puede ayudar a minimizar los síntomas de la menopausia y perimenopausia. No olvides que promover la diversidad microbiana a través de una dieta equilibrada, la inclusión de probióticos y prebióticos, así como la reducción del estrés y la incorporación de actividad física regular, pueden ser estrategias clave para mantener una microbiota saludable.
Fuentes y autoría:
Marta Puchol. Licenciada en Farmacia y Coach Nutricional.
IG: @adietacontigo